La semana pasada fuimos invitados a casa del chef Eduardo Moreno para degustar de un sabroso almuerzo impreso de su nuevo estilo donde resalta una propuesta clásica pero siempre con su toque tecnológico que le quedó luego de su paso por la cocina molecular.
Como agasajo a los profesores argentinos, Carlos Catania y Silvia Avagnina, además de la grata compañía de nuestros amigos Waleska Schumacher, Osmelia Díaz-Granados y Héctor Soucy, pudimos probar algunos platillos de Eduardo maridados con dos grandes vinos como son el uruguayo Preludio, tope de línea de Familia Deicas, y el chileno Chilcas Red One, de la bodega Via Wine. Terminamos con un fabuloso ron carupanero Legendario.
Pasamos un rato muy agradable. Le recomendamos que no dejen de vivir esta interesante experiencia, armen su grupo y llamen a Eduardo, quien los recibirá en su casa para consentir sus paladares.
Eduardo Moreno ensamblando los platos
Mini pizza japonesa, con rúgula, atún curado y salsa de wasabi
Lomito con reducción de oporto acompañado de polenta
Mousse de chocolate con coulis de frutas rojas, milhoja y crema inglesa
Manchego con mango y jengibre confitados
Héctor Soucy explicándonos sobre la composición de los habanos
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