Salta
Rumbo a Cafayate
Bodegas Etchart
Visitando las viñasViaje estupendo fue el que hicimos a las Bodegas Etchart, en la región de Salta, Argentina. Salimos del terminal de autobuses en Buenos Aires al mediodía y recorrimos catorce horas en un bus-cama, llegando a Salta -capital de la región de Salta- muy temprano en la mañana del día siguiente.
Salta es una ciudad bastante pintoresca que es conocida por sus atractivos eco-turísticos. Sus alrededores están rodeados de montañas, ríos y praderas, ideal para las personas que buscan un contacto íntimo con la naturaleza.
Desde allí cuadramos un auto que nos llevó al Valle de Cafayate, a unos 180 kilómetros. El camino es impresionante, desde frondosos sembradíos frutales hasta tierras áridas similares al Gran Cañón del Colorado que, con un cielo azul intenso, constituyen un paisaje impresionante, inolvidable.
Cafayate es un pequeño pueblo andino de 11 mil habitantes, situado a 1750 metros sobre el nivel del mar, muy cerca de la sierra boliviana. Su belleza rústica y lo virgen de su entorno nos hace rememorar un pueblo que se quedó suspendido siglos atrás. Pequeñas ventas de alimentos y artesanías con gente atenta y sencilla, convidan a los visitantes un trato lleno de respeto y gentileza.
La comida típica es suculenta. Las empanadas, el cabrito, los quesos de cabra artesanales y los dulces con membrillo son parte de la dieta diaria de sus pobladores.
Fuimos a Cafayate invitados por Bodegas Etchart, localizada en el Valle de Calchaquíes, para conocer sus históricos viñedos, los más altos del mundo. Atendidos impecablemente por Marcelo Colombo y Ana Cabanillas, pudimos pasear por las bellas viñas, visitar la bodega y degustar alguno de los reputados vinos de su portafolio.
El viñedo se remonta al año 1850, cuando fueron plantadas las primeras vides de Torrontés. Hay que resaltar que al día de hoy siguen dando frutos plantas cultivadas en el año 1862. En 1938, Arnaldo B. Etchart compró las tierras de la Finca La Florida y desarrolló nuevos cultivos de cepas francesas: Cabernet Sauvignon, Chardonnay, Malbec y Merlot.
En 1996, la trasnacional francesa Permod Ricard adquirió estas viñas y otras en el Valle de Luján de Cuyo en Mendoza, y realizó importantes inversiones para darle un gran empuje a los productos Etchart, sobretodo para exportarlos, siendo Venezuela uno de los principales mercados emergentes de ese casa.
Las líneas de vinos Etchart cuenta con los "Gran Reserva", con variedades de Malbec y Cabernet Sauvignon, etiquetado como "Arnaldo B." en honor al fundador de la marca y el blanco reserva compuesto por Chradonnay, denominado "C.Rosa". Los recomendamos ampliamente.
Luego tienen la gama "Etchart Privado", con varietales individuales. Por último está la línea standard "Río de Plata", con vinos jóvenes bastante frescos y afrutados, equilibrados para tomar en cualquier ocasión.
Etchart tiene una propuesta elegante y honesta, con distintas opciones para toda ocasión.
Salta es una ciudad bastante pintoresca que es conocida por sus atractivos eco-turísticos. Sus alrededores están rodeados de montañas, ríos y praderas, ideal para las personas que buscan un contacto íntimo con la naturaleza.
Desde allí cuadramos un auto que nos llevó al Valle de Cafayate, a unos 180 kilómetros. El camino es impresionante, desde frondosos sembradíos frutales hasta tierras áridas similares al Gran Cañón del Colorado que, con un cielo azul intenso, constituyen un paisaje impresionante, inolvidable.
Cafayate es un pequeño pueblo andino de 11 mil habitantes, situado a 1750 metros sobre el nivel del mar, muy cerca de la sierra boliviana. Su belleza rústica y lo virgen de su entorno nos hace rememorar un pueblo que se quedó suspendido siglos atrás. Pequeñas ventas de alimentos y artesanías con gente atenta y sencilla, convidan a los visitantes un trato lleno de respeto y gentileza.
La comida típica es suculenta. Las empanadas, el cabrito, los quesos de cabra artesanales y los dulces con membrillo son parte de la dieta diaria de sus pobladores.
Fuimos a Cafayate invitados por Bodegas Etchart, localizada en el Valle de Calchaquíes, para conocer sus históricos viñedos, los más altos del mundo. Atendidos impecablemente por Marcelo Colombo y Ana Cabanillas, pudimos pasear por las bellas viñas, visitar la bodega y degustar alguno de los reputados vinos de su portafolio.
El viñedo se remonta al año 1850, cuando fueron plantadas las primeras vides de Torrontés. Hay que resaltar que al día de hoy siguen dando frutos plantas cultivadas en el año 1862. En 1938, Arnaldo B. Etchart compró las tierras de la Finca La Florida y desarrolló nuevos cultivos de cepas francesas: Cabernet Sauvignon, Chardonnay, Malbec y Merlot.
En 1996, la trasnacional francesa Permod Ricard adquirió estas viñas y otras en el Valle de Luján de Cuyo en Mendoza, y realizó importantes inversiones para darle un gran empuje a los productos Etchart, sobretodo para exportarlos, siendo Venezuela uno de los principales mercados emergentes de ese casa.
Las líneas de vinos Etchart cuenta con los "Gran Reserva", con variedades de Malbec y Cabernet Sauvignon, etiquetado como "Arnaldo B." en honor al fundador de la marca y el blanco reserva compuesto por Chradonnay, denominado "C.Rosa". Los recomendamos ampliamente.
Luego tienen la gama "Etchart Privado", con varietales individuales. Por último está la línea standard "Río de Plata", con vinos jóvenes bastante frescos y afrutados, equilibrados para tomar en cualquier ocasión.
Etchart tiene una propuesta elegante y honesta, con distintas opciones para toda ocasión.
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