jueves, 21 de diciembre de 2006

Tabacos venezolanos con calidad de exportación





Visitar una fábrica de tabacos es una experiencia que nos remonta al pasado. Es increíble ver como esta industria centenaria, legado de los indígenas americanos, en pleno Siglo XXI mantiene casi intacta su artesanal forma de producción.

Tuvimos la oportunidad de visitar en Cumaná, Estado Sucre, a la fábrica de Tabacos Bemúdez, que tiene una tradición de casi 100 años, y ha popularizado entre los fumadores de puros su marca “Crispín Patiño”, considerada por muchos uno de las mejores puros que ofrece el mercado venezolano. Allí observamos de cerca este singular proceso de producción.

Sus trabajadores, predominantemente mujeres, escogen las hojas de tabaco rubio, humectan y despalillan, sacándole la vena. Por paquetes se pasan o los "pianos" o mesas tabaqueras donde ese arman y se les pone la capa (la hoja exterior que es la más fina).

Luego se clasifican según los tamaños ya establecidos con distintos nombres (señoritas, puritos, N° 2, robustos, torpedos, churchill, etc), luego se anillan y se envuelven con papel celofán para disponerlas en cajas de madera de acuerdo con el tipo.

La Tabaquería Bermúdez no exporta directamente, pero su gerente Miguel Patiño asegura que el "Crispín Patiño" llega al exterior en manos de turistas a Alemania, Colombia, Brasil, España, EE UU y Francia.

1 comentario:

Unknown dijo...

Ahora puedes adquirir las vitolas de la emblemática línea Crispín Patiño directamente desde la comodidad de tu hogar, accediendo a su nueva tienda virtual crispinpatino.com.ve. Visítala y descubre la verdadera personalidad del tabaco venezolano.