
martes, 28 de abril de 2009
Los alimentos derivados del cerdo no propagan la gripe porcina

Una de las consecuencias negativas de la globalización, es que las enfermedades se propagan a gran velocidad por el mundo, siendo los humanos su vehículo de expansión.
domingo, 26 de abril de 2009
Coctelería con vinos espumantes

A continuación, damos algunos nombres e ideas de cócteles hechos con base en vinos espumantes:
1) Mimosa (Vino espumante y jugo de naranja)
2) Kir Royale (Vino espumante y crema de cassis)
3) Terciopelo negro -Black Velvet- (vino espumante y cerveza negra)
4) Sangre de Nelson -Nelson’s Blood- (Vino espumante y Oporto)
5) Beso de Buenas Noches (Vino espumante, Amargo de Angostura, Campari, y un toque de azúcar)
6) Mañana de Gloria (Vino esumante, jugo de naranja y triple sec)
7) Lago Webster (Vino espumante, triple sec y cranberry)
4) Sangre de Nelson -Nelson’s Blood- (Vino espumante y Oporto)
5) Beso de Buenas Noches (Vino espumante, Amargo de Angostura, Campari, y un toque de azúcar)
6) Mañana de Gloria (Vino esumante, jugo de naranja y triple sec)
7) Lago Webster (Vino espumante, triple sec y cranberry)
8) Bellini (Vino espumante, pulpa de durazno o melocotón y una cereza)
"Las nuevas ambiciones del Tabaco" en Todo en Domingo







viernes, 24 de abril de 2009
Il boccon divino: Los vinos del Marqués
Por F. Point
Mi poeta preferido es Groucho Marx, en serio. Muchas de sus líneas habrían sido consideradas, en un país como Grecia, muestras de un talento natural para la expresión en imágenes, que es lo que yo entiendo por poesía. Como en aquella oportunidad cuando Groucho, huyendo de la policía, se mete dentro de un pajar. Al ser descubierto, es interrogado: “Y Ud. qué hace allí? -Nada, señor policia, estoy buscando una aguja.”
En una revista leí que el poeta inglés Thomas Eliot, reconoció genio de Groucho para la poesía y lo invitó a su casa para manifestarle su admiración. Después de la cena, al segundo oporto, el vate le pidió a Marx que no lo siguiera llamando Mr. Eliot, sino Tom, a secas. A lo cual Groucho accedió con una sola condición, que también Eliot y su esposa lo llamaran a él “Tom”. Recuerdo esta salida mientras apuro una botella de VOLNAY “CHAMPANS” MARQUIS D’ANGERVILLE 2000, que me escancia el buen amigo Antonio Hernández en la barra de “L’Atelier” (rue Montalembert). “El padre era un individuo formidable, el viejo marqués, Jackie, lo conocí muy bien”, me dice Antonio cuando le hablo de haber conocido a Guillaume, el hijo, heredero del título y del Domaine. “A él también lo conozco, es un digno sucesor el padre”, concluye este “Maitre d’” legendario, no acostumbrado a prodigar elogios.

En una revista leí que el poeta inglés Thomas Eliot, reconoció genio de Groucho para la poesía y lo invitó a su casa para manifestarle su admiración. Después de la cena, al segundo oporto, el vate le pidió a Marx que no lo siguiera llamando Mr. Eliot, sino Tom, a secas. A lo cual Groucho accedió con una sola condición, que también Eliot y su esposa lo llamaran a él “Tom”. Recuerdo esta salida mientras apuro una botella de VOLNAY “CHAMPANS” MARQUIS D’ANGERVILLE 2000, que me escancia el buen amigo Antonio Hernández en la barra de “L’Atelier” (rue Montalembert). “El padre era un individuo formidable, el viejo marqués, Jackie, lo conocí muy bien”, me dice Antonio cuando le hablo de haber conocido a Guillaume, el hijo, heredero del título y del Domaine. “A él también lo conozco, es un digno sucesor el padre”, concluye este “Maitre d’” legendario, no acostumbrado a prodigar elogios.
Recuerdo lo de Groucho porque, hace dos años, cuando conocí al nuevo marqués, fue en una ocasión donde todo era para ser recordado. Fue a mediados de octubre de 2007 durante una cena organizada por el abogado y coleccionista Andy Rawls, en “L’ami Louis”. Andy es un largo amigo de los D’Angerville y poseedor de una envidiable colección de “sus millésimes”. Después de despachar sendas botellas de “Salon” 1990, comenzó el pantagruélico desfile de platos típicos de este super bistrot, cuyos principales atributos son la frescura y las cantidades desorbitadas. Pasamos del foie-gars frío con pan tostado a los caracoles más grandes de la tierra y a las ancas de rana, tan largas, finas y, seguramente, apetitosas como las de Rita Hayworth, todo bañado en litros de mantequilla y acompañados con kilos del más perfumado ajo. Para acompañar estos “antipasti”, una jugosa y aromática mágnum de Trimbach “Cuvée Fredéric Emile” 1998, con todo el alcohol necesario para adormecer nuestra racionalidad y entregarnos al ejercicio de la más irresponsable gula. Enseguida llegó la “poulet” de Bresse, simplemente al horno con ajos en su perfumada cavidad; la pierna de cordero de Pauillac, perfectamente cocida en horno de leña; varias piezas de confit; dos riñones a la crema, para terminar con un gigantesco “côte de boeuf” con su mantequilla preparada y el pastel de papas en aceite de foie. Debo decir que no éramos pocos: dos D’Angerville, dos Rawls, dos amigos de Nueva Cork y este cronista, siete en total, lo que explica, en parte, la largueza del banquete. A partir del blanco de Trimbach, todos los vinos fueron tintos, todos Volnay y todos D’Angerville en mágnum: TALLEPIEDS 1995; CLOS DES DUCS 1999 y CHAMPANS 2001. Todos los sabores, divinamente brutales, de los benditos fogones de L’AMI LOUIS, cedieron, como el león del cuento, ante la versatilidad del Volnay. Un vino que es sinónimo de “finesse” y elegancia, una especie de Chateau Lafite bourguiñón, pero que en el año justo y las manos indicadas, como las de los D’Angerville, resulta en un caldo que puede sorprender por su concentración aromática y sus taninos a punto para resistir la selección de platos de Louis, no el fundador, sino el actual propietario, tan rollizo como el primero. Después de los quesos y las exóticas frutas, el marqués pidió una botella de su Marc de Burgogne, para darle una mano a nuestro comprometido tracto gastro-intestinal. A la segunda copita de Marc, el hijo del mítico Jackie D’Angerville, me dice: “No me sigas diciendo marqués, llámame Guillaume”. Le digo: “Con una condición, que tú también me llames a mí Guillaume.” Y, con una sonrisa, sirvió la tercera copita de Marc de Bourgogne, en el cual todos los participantes ciframos las esperanzas para llegar vivos hasta la mañana siguiente.
Vía Prodavinci.com
Sábado de Voyage en Café Atlantique
miércoles, 22 de abril de 2009
Tamayo & Cia. apuesta a los vinos españoles con "La Rioja Alta"



Santamaría arremete nuevamente en contra la "gastronomía molecular"

En una entrevista en la revista francesa L'Hotellerie-Restauration que trae a relucir el diario El País de España, revela la posición crítica que ha mantenido Santamaría desde la publicación de su libro "La Cocina al Desnudo", en donde menosprecia al trabajo de sus colegas que han sido reconocidos en las primeras posiciones por dicha lista, tales como Adrià, Andoni Luis Aduriz, Juan Mari Arzak y Joan Roca (cuestión que ha colocado a España como el país con mejores chefs catalogados por dicho escalafón). Asimismo, el inglés Heston Blumenthal y el danés, Rene Redzepi, ambos seguidores de la misma tendencia, también fueron ungidos en el "top 10" de dicho ranking.
"La diferencia esencialmente está en el hecho de que sea el líder de una cierta cocina moderna que influye en las jóvenes generaciones. El camino que él ha elegido implica consecuencias muy penosas, pues si se remplazan los productos naturales por los industriales se cambian todos los parámetros de nuestra gastronomía", dice Santamaría.
Vía El País
Senos Ayuda invita a un “Tour Vinícola y Gastronómico en Bordeaux”

Saldrá de Caracas el domingo 30 de Agosto, para iniciar en Bordeaux el lunes 31 y finaliza el 6 de Septiembre. El viaje a Bordeaux visitará las siguientes bodegas: Château Magnol , Château Margaux, Château Pichon-Longueville Comtesse de Lalande , Château Mouton-Rothschild, Château Kirwan, Château Cheval Blanc, Château Haut Brion y Château Guiraud.
Seguidamente, se puede optar por un “Windstar Cruises”, una de las navieras ”boutiques” de mayor prestigio, donde los vaijeros podrán disfrutar del "Wind Surf", un velero de lujo con 5 mástiles y tan solo 312 pasajeros, que zarpará desde Venecia el 6 de Septiembre y recorrerá Eslovenia y Croacia, incluye la famosa ciudad museo de Dubrovnik. Este crucero concluye en Venecia el siguiente domingo 13 de Septiembre.
Por si fuera poco, el viaje estará engalanado con el inteligente y divertido humorista Laureano Márquez, quien cada noche deleitará a los viajeros con sus charlas sobre lo que se verá y hará.
Los contactos para cualquier inquietud, preguntas, arreglos de pagos, depósitos, los pueden efectuar directamente con nuestros amigos de “Chateau Travel Services” Mayra y Sergio Esteva chateautravel@cantv.net (0414 y 0412 – 305.79 96). Asimismo con “Representaciones High Class”, Alexis Navas, Andreina León, Luis Nunes y Scarlet León (0212 751.5278 / 9454) representaciones1@cantv.net / info_excellence@cantv.net /alexisnavas55@cantv.net
Cantineaux en "El Círculo" de Barquisimeto
American Wine Blog Awards 2009

En ese sentido, desde hace tres años se celebran los "American Wine Blog Awards". Actualmente existen más de 800 blogs especializados, entre los que se ha escogido a los premiados de 2009 mediante la participación de expertos y del público general.
Este año han sido galardonados los siguientes blogs:
Vinography (Best Overall Blog),
The Good Grape,(Best Graphipcs or Presentation)
Lenndevours (Best Single Subject Blog)
The Wine Collector (Best Business Industry Blog)
Benchland Blog (Best Winnery Blog)
Bigger Than Your Head (Best Wine Reviews).
martes, 21 de abril de 2009
¿Las conchas de los quesos son comestibles?

Vía Slashfood.com
La nueva campaña de Chivas Regal



“Live with Chivalry” es el slogan sobre el que se desarrolla la nueva imagen de marca de Chivas Regal, la cual se ha lanzado en los 150 países donde tiene presencia. ¡Muy atinada para éstos tiempos que vivimos!
Il boccon divino: la lapa de Hugo Batista
Por F Point
Las políticas proteccionistas, a favor de las especies en vías de extinción, que se han implementado en Europa a lo largo de las últimas décadas han comenzado a dar resultados. Hasta hace apenas unos veinte años, al menos aquí, en París, no estaba tan difundida la oferta de “gibiers” como en las temporadas más recientes. Ahora es posible, sin mayores dificultades, adquirir notables piezas de caza, como ciervos de lo Pirineos; “biches” (la hembra del venado) de Alsacia; jabalí de las montañas de Borgoña o de Avelino, en la Campania italiana; faisanes de la región del Loira; liebres de Normadía y muchas más.
Cada vez que me enfrento a uno de estos platos, lo hago con la misma gula que sentía Santa Teresa por las hostias, al punto de ser reprobada por su confesor cuando se la encontró comulgando, por segunda vez, en los servicios vespertinos. Aunque no sólo por eso, ha sido siempre la madre de Ávila mi santa preferida. Y cada vez que lo hago recuerdo cuando tuve la oportunidad de probar la lapa en uno de mis contados viajes a Venezuela. De lo cual hará cosa de veinte años o algo por el estilo. Había ido a participar en un concurso de pesca del pavón y a aceptar la invitación de la amiga María Fernanda Palacios a dar unas conferencias en su universidad. A la salida de una de esas charlas, María Fernanda me dice: “Esta noche cenamos en la casa, te tengo una sorpresa”. Las suyas son sorpresas que siempre agradezco, porque siempre han sido estupendas. Al llegar a su apartamento, quedé subyugado por los olores que salían de la cocina. Que se trataba de una pieza de “gibier” era indudable, como que era primera vez que olía algo parecido; un aroma acidulado, con frutas del campo y sol, transparente y alegre. “Este es Hugo Batista, maestro como artista y como chef”, y me presentó a un hombre de mediana estatura, muy blanco, de pelo canoso, con anteojos que no disimulaban una mirada que me pareció, al mismo tiempo, inteligente, pícara y noble, buen conversador y con la fineza de los diplomáticos de otra época. “Lo que Hugo está preparando es una lapa, algo que nunca has comido, Fredie.” Después de los dos o tres Tío Pepe míos y la misma cantidad imprecisa de escoceses de Hugo, pasamos a la mesa. En una gran bandeja nadaban, con evidente regocijo, los trozos dorados y lustrosos del inédito animal. Los aromas se habían domesticado y se integraban en un olor rico en frutas y compotas, vino y verduras que me recordaba a algún “lapin” del “Grand Vefour”. La generosidad venezolana comenzó a llenar mi plato con las mejores piezas, hasta que expresé, con un gesto del cual no he terminado de arrepentirme, que era suficiente. Una experiencia inolvidable. Aquella carne rosada y turgente, como la tez de las cortesanas venecianas de Palma Vecchio, protegida por su propia piel, blanda y cubierta, como la de las mujeres aceitadas de las playas de Margarita, con una salsa brillante y ligera con los matices olfativos de la cornucopia tropical. La carne blanda, con una textura firme y homogénea, delicada, que, con nobleza, se había enriquecido con los ingredientes. Algo sencillamente exquisito. “Hay muchas maneras de prepararla”, comenzó Hugo, “yo he llegado a esta receta porque me parece que respeta el sabor de la lapa que es tan delicado. Lo primero es trocear el animal, lavarlo con vinagre y agua y ponerlo a marinar, de un día para otro, con ajoporro, zanahoria, su hoja de laurel, algunas hierbitas de Provence, nada de ajo, y vino, que tiene que ser blanco, no tinto, como hacen algunos. Al día siguiente, se espolvorean las piezas con harina, se salpimentean, se doran dulcemente, se regresan a la bandeja y se hunden en la marinada, al cual se le ha agregado suficiente caldo rico de pollo para cubrirlo todo; se tapa con papel de aluminio y se pone sobre un par de hornillas a fuego lento”. “Por cuánto tiempo”, pregunto. Y Hugo sin titubeos: “El que le lleva a tres amigos bajar un frasco de Etiqueta Negra.” “Al final”, concluyó, “cuando estén blandos se sacan los trozos, se cuela la salsa, se reduce y, de ser necesario, se espesa con una o dos cucharadas de “beurre manié”. Lo mejor para acompañar esta lapa es un blanco de Borgoña, como este Mersault-Perrières, que no sé de dónde sacó María Fernanada, por ejemplo. “La próxima vez me traigo una caja de Bâtard-Montrachet”, prometí con desmesura, pero convencido de que era la mejor manera de recompensar aquella revelación culinaria, auspiciada por generosidad de María Fernanda Palacios y la sabiduría del querido y recodado Hugo Batista, maestro como artista y como chef.

La “saison”, que acaba de terminar, fue especialmente pródiga para este cronista, que se confiesa adicto a las carnes de caza. Entre otros condumios, cuento el lomo de ciervo, simplemente al horno con su compota de frutas, de “Lameloise”; la sorprendente “lievre royale” de Alain Dutournier en su “Carré des Feuillants”; el jabalí brassato con su discreta acidez de tomates Sanmarzano, de Alfonso Iaccarino en su “Don Alfonso”, el mejor restaurant italiano al sur de Florencia; otro jabalí, esta vez guisado en vino tinto de Borgoña, salido de los fogones de Madame Confuron en Vosne Romanée, o su ciervo, de la misma región, en “civette”; la biche del “Café Constante”, el simpático y acertado bistrot de Christian Constant; los pichones de la joven Madame Escoffier en su pequeño “Ma cuisine”, de Beaune y unos cuantos más. Todos extraordinarios, desde el exquisito ingenio de Dutournier hasta la robusta cocina regional de Bernadette Confuron.
Cada vez que me enfrento a uno de estos platos, lo hago con la misma gula que sentía Santa Teresa por las hostias, al punto de ser reprobada por su confesor cuando se la encontró comulgando, por segunda vez, en los servicios vespertinos. Aunque no sólo por eso, ha sido siempre la madre de Ávila mi santa preferida. Y cada vez que lo hago recuerdo cuando tuve la oportunidad de probar la lapa en uno de mis contados viajes a Venezuela. De lo cual hará cosa de veinte años o algo por el estilo. Había ido a participar en un concurso de pesca del pavón y a aceptar la invitación de la amiga María Fernanda Palacios a dar unas conferencias en su universidad. A la salida de una de esas charlas, María Fernanda me dice: “Esta noche cenamos en la casa, te tengo una sorpresa”. Las suyas son sorpresas que siempre agradezco, porque siempre han sido estupendas. Al llegar a su apartamento, quedé subyugado por los olores que salían de la cocina. Que se trataba de una pieza de “gibier” era indudable, como que era primera vez que olía algo parecido; un aroma acidulado, con frutas del campo y sol, transparente y alegre. “Este es Hugo Batista, maestro como artista y como chef”, y me presentó a un hombre de mediana estatura, muy blanco, de pelo canoso, con anteojos que no disimulaban una mirada que me pareció, al mismo tiempo, inteligente, pícara y noble, buen conversador y con la fineza de los diplomáticos de otra época. “Lo que Hugo está preparando es una lapa, algo que nunca has comido, Fredie.” Después de los dos o tres Tío Pepe míos y la misma cantidad imprecisa de escoceses de Hugo, pasamos a la mesa. En una gran bandeja nadaban, con evidente regocijo, los trozos dorados y lustrosos del inédito animal. Los aromas se habían domesticado y se integraban en un olor rico en frutas y compotas, vino y verduras que me recordaba a algún “lapin” del “Grand Vefour”. La generosidad venezolana comenzó a llenar mi plato con las mejores piezas, hasta que expresé, con un gesto del cual no he terminado de arrepentirme, que era suficiente. Una experiencia inolvidable. Aquella carne rosada y turgente, como la tez de las cortesanas venecianas de Palma Vecchio, protegida por su propia piel, blanda y cubierta, como la de las mujeres aceitadas de las playas de Margarita, con una salsa brillante y ligera con los matices olfativos de la cornucopia tropical. La carne blanda, con una textura firme y homogénea, delicada, que, con nobleza, se había enriquecido con los ingredientes. Algo sencillamente exquisito. “Hay muchas maneras de prepararla”, comenzó Hugo, “yo he llegado a esta receta porque me parece que respeta el sabor de la lapa que es tan delicado. Lo primero es trocear el animal, lavarlo con vinagre y agua y ponerlo a marinar, de un día para otro, con ajoporro, zanahoria, su hoja de laurel, algunas hierbitas de Provence, nada de ajo, y vino, que tiene que ser blanco, no tinto, como hacen algunos. Al día siguiente, se espolvorean las piezas con harina, se salpimentean, se doran dulcemente, se regresan a la bandeja y se hunden en la marinada, al cual se le ha agregado suficiente caldo rico de pollo para cubrirlo todo; se tapa con papel de aluminio y se pone sobre un par de hornillas a fuego lento”. “Por cuánto tiempo”, pregunto. Y Hugo sin titubeos: “El que le lleva a tres amigos bajar un frasco de Etiqueta Negra.” “Al final”, concluyó, “cuando estén blandos se sacan los trozos, se cuela la salsa, se reduce y, de ser necesario, se espesa con una o dos cucharadas de “beurre manié”. Lo mejor para acompañar esta lapa es un blanco de Borgoña, como este Mersault-Perrières, que no sé de dónde sacó María Fernanada, por ejemplo. “La próxima vez me traigo una caja de Bâtard-Montrachet”, prometí con desmesura, pero convencido de que era la mejor manera de recompensar aquella revelación culinaria, auspiciada por generosidad de María Fernanda Palacios y la sabiduría del querido y recodado Hugo Batista, maestro como artista y como chef.
Vía Prodavinci
lunes, 20 de abril de 2009
Los cocineros vanguardistas se consolidan en los "oscar de la gastronomía"

Se impusieron claramente los cocineros vanguardistas, con Ferran Adrià como estandarte al ser declarado nuevamente como el primero del mundo, repitiendo así la hazaña que alcanzó en el 2002 y tres veces consecutivas desde 2006, quien celebró en Londres junto a Andoni Luis Aduriz, con su respectivo ascenso al cuarto lugar; Juan Mari Arzak, por su parte, se enclava en el octavo y Joan Roca, del Celler de Can Roca, llega al quinto puesto y por primera se encarama en la cúspide. Así, los españoles ganan cuatro eslabones dentro de los 10 primeros del mundo, lo que consolida a la nueva gastronomía ibérica como de la más apetecida del mundo y mejor calificada que la francesa, que nada más dos llegan a coronarse en el "top 1o", Michel Bras (séptimo) y Pierre Gagnaire (noveno).
El chef inglés Heston Blumenthal, del Fat Duck, también de la tendencia "tecnoemocional", ocupó el segundo escalafón, rompiendo con la especulación de si el incidente ocurrido en febrero de este año con un virus que extrañamente afectó a un número importante de sus comensales, lo enlodaría (¿será porque se trata de un inglés?). Adrià se solidarizó con él y le dedicó su premio.
Otro seguidor del estilo de El Bulli, el danés Rene Redzepi, ascendió al tercer puesto. Sus colegas de Suecia, Mathias Dalgrehn y Oxen, también lograron colocarse bien. Grant Achatz, del establecimiento Alinea de Chicago, llegó el número 10 y el estadounidense Thomas Keller se alza con la sexta posición con su Per Se en Nueva York. De los suramericanos, sólo destaca el brasileño del restaurante DOM, Alex Atala, en el puesto 24.
Bienvenidos los vinos Norton, mendocinos pioneros



Y para enriquecer más las buenas opciones del Sur, en estos días está en Venezuela el Key Account Manager de Bodega Norton, Eduardo Swinnen, quien se encuentra de gira presentando sus productos y hoy nos deleitó con una amena cata convocada en Licores Mundiales por Adriana Gonzáles, Gerente de Categoría del Complejo Licorero Ponche Crema, empresa encargada de su importación.
Rememorando su historia, Bodega Norton fue fundada hace 114 años por un empresario británico, Edmund James Palmer Norton, quien se instaló en las tierras mendocinas después de enamorarse de ese país y una bella argentina. Visionario, fue el primero en sembrar vides europeas en el valle de Luján de Cuyo, el cual se ha convertido uno de los terruños más reputados del llamado "Nuevo Mundo". Un siglo después, en 1993, la reconocida cristalería austríaca Swarovski, adquirió la Bodega, inyectándole gran capital y modernizando sus procesos.
Hoy en día producen más de 12 millones de botellas al año y están presentes en más de 60 países del mundo. Entre sus galardones, destaca la calificación recibida en el 2008 por la revista norteamericana Wine & Spirit, como "Value Brand of the Year", algo así como destacada en calidad/precio.

Pudimos degustarlos todos y de verdad que son vinos muy bien logrados, en especial el Perdriel, que recomendamos a viva voz. Hay que aprovechar que están entrando con precios bien ajustados por lo que seguramente se convertirán en uno de los portafolios de más movimiento de la temporada.
domingo, 19 de abril de 2009
Mañana se devela la lista de los 50 mejores restaurantes de los Premios S. Pellegrino

Los jueces que deciden los mejores restaurantes del mundo son comentaristas gastronómicos, propietarios de restaurantes y los propios cocineros, que juzgan la labor de otros colegas. Según el diario El País de España: "Este año ha crecido en un 20% número de votantes y en total son 837 expertos en apreciaciones culinarias quienes emiten 4.185 opiniones. Para que el jurado se distribuya tarea, este mundo de la alta calidad gastronómica se divide en 26 regiones. Como novedad, este año Estados Unidos y Canadá componen tres regiones en vez de una; Asia suroriental se ha dividido en dos regiones, mientras que China y Corea forman una sola y Japón, dada su potencia actual, es también una región única. Pero en este reparto se echa de menos mayor foco en otros países emergentes de América, como México, Perú o Brasil. En estos premios 2009 serán nueve los nombres nuevos que aparecerán en la lista de los 50 principales."
Por su parte, el francés Joel Robuchon, cocinero con mayor número de estrellas Michelin en su haber pechera, recibirá un reconocimiento especial por su destacada trayectoria.
Si quieren conocer la lista de los 50 mejores restaurantes del año 2008, pueden hacer click aquí.
sábado, 18 de abril de 2009
Realizado el "II Curso de Cocina para Principiantes" dictado por Nury de Sucre

La Escuela Collectania sirvió nuevamente de escenario para el "II Curso de Cocina para Principiantes y Recién Casados" dictado por la cocinera Nury Gómez de Sucre y organizado por Gourmet Lounge. En esta oportunidad, los asistentes aprendieron a hacer ceviches, crepes, diferentes salsas para pastas, carnes rojas y postres. Disfrutando de los vinos sureños Trapiche, Oveja Negra y Don Pascual, entre diversión y aprendizaje se pasó un sábado de lo más exquisito...
Próximamente vendrán nuevas convocatorias temáticas con reconocidos chefs nacionales y extranjeros. Estén muy pendientes...
La noche en que se abrió el Casillero del Diablo 2007










Fotografías cortesía de nuestro alíado 2night Caracas
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